¿Es posible viajar dos veces al mismo recuerdo? El cineasta construye una cabaña de madera en una orilla aislada del río cerca de la isla donde jugaba en su infancia, hoy anegada por la construcción de una presa que ha dejado la tierra invisible. Los árboles de la isla permanecen sin embargo todavía en pie, como mástiles de un juguete roto en medio del agua. El aire entre los troncos será el único espacio posible para revivir el pasado.

Zumiriki es un naufragio en la memoria, una experiencia de cuatro meses aislado en una cabaña de madera en el bosque de la infancia, con la sola compañía de dos gallinas, un pequeño huerto y un reloj detenido para siempre a las 11 y 36 y 23 segundos.

“Sabíamos que un pintor lo puede decir todo pintando una sola flor. Ahora sabemos que un cineasta lo puede contar todo filmando una sola nube”.
Isaki Lacuesta

«Audaz y magistral. Aquí se ve que el cine es la casa de la infancia».
Ignacio Agüero

«Esta película no se parece a ninguna otra, como un Robinson Crusoe de la memoria».
Eric Pauwels

“Una fiesta para el alma, una antropología del tiempo, una obra maestra”.
Alan Berliner